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De que estamos hablando (X)

Hoy he leido la noticia en BBG, Qwirkle, el flamante ganador del SdJ 2011, ha vendido en Alemania 350.000 copias.

El SdJ es toda una institución en Alemania, es comparable al Premio Planeta, los Oscars, o tener un Globo de Oro, el juego se encuentra en todo tipo de tiendas, y todo el mundo lo compra como si fuera la canción del verano. Un ganador puede llegar a las 500.000 unidades en Alemania y un nominado pasar de 500 a 10.000 unidades en un «plis-plas».

Es evidente que los alemanes «se lo curran», desde 1978 lo están concediendo, un mercado como el alemán (que aparte es el referente mundial), no se crea de la noche a la mañana.  Personalmente pienso que el fenómeno de los juegos despego a finales del siglo pasado mundialmente. Juegos como Carcassone, Ticket to ride, Keltis, Dominion, Catan, se han convertido en clásicos y referentes para todo el que quiera algo «diferente».

Con los años, espero que lleguemos a unos niveles equiparables y veamos en un FNAC o ECI , el juego del año , vendiendo 100.000 copias en una campaña de navidad. No tengo de engañar a nadie que esto haría que de pronto nos convertiriamos en un país con editores, diseñadores y producción nacional 🙂 … «Soñar es gratis» 🙂

.. ya se vio en las tiendas con la pegatina...

Aunque he tenido de poner el link a la web de Jugamos todos, parece que alguien esta «PATINANDO» con el dominio del Juego del año, la url que tenían http://www.premiojda.es no lleva a ningún sito ¿me habre equivocado?.. si no es así, que alguien lo arregle POR FAVOR!!!

Nota: es curioso como un juego abstracto como el Qwirkle de 2006 se ha convertido en el Spiel de 2011, y ha renovado su carrera, claro esta que entrar en las nominaciones los juegos editados en el país durante el año. Como en el premio del juego del año en España. Sera que los alemanes no tiene tantos miramientos en ver el lado» comercial» de los productos…

Una respuesta a «De que estamos hablando (X)»

Muy interesante. Ojalá llegue ese día en el que juegos de mesa modernos desplacen en las estanterías de los grandes centros comerciales a los clásicos Trivial, Monopoly, etc.

En los concursos de premios nunca llueve al gusto de todos por definición… además, hay que diferenciar los tipos de premios: no es lo mismo un premio cuya concesión signifique un aumento en las ventas del producto (como has indicado), con la influencia que pueden llegar a ejercer las editoriales cuyo principal objetivo es ése, que un premio, por ejemplo, otorgado por el propio gremio de autores… desde otra perspectiva diferente, donde la comercialidad del producto no tenga tanto peso. Los dos tipos de premios podrían convivir perfectamente y aportar dos visiones complementarias al mundo de los juegos de mesa contemporáneo.

Es cierto también que no habría que hacerle ascos a la comercialidad de los juegos porque la base de su creación es mercantil pero tampoco rasgarnos las vestiduras si tanto el SdJ como el JdA se acaban definiendo como lo que son: premios a la comercialidad o a la mejor estrategia de márqueting por parte de una editorial más que premios a la originalidad o al mejor juego.

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